Cuánto hay que ganar para ser de clase media en la Ciudad de Buenos Aires

En diciembre fueron necesarios $745.270 para una familia de cuatro integrantes, según los datos de la Dirección General de Estadística y Censos porteña

Luján Berardi

La aceleración inflacionaria de diciembre, que según los últimos datos publicados en la Ciudad fue de 21,1%, luego de la caída de los programas de congelamientos, controles y acuerdos de precios, a lo que se sumó la devaluación del 54% del dólar oficial y el aumento de los combustibles, repercutió en el repunte de los precios, el nivel de actividad y consumo.

En este escenario, la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC), informó que una familia de cuatro personas (dos mayores y dos menores) necesitó un ingreso total de $745.270 en diciembre para ser considerada de clase media, comprendiendo en ese estrato el hogar cuyos ingresos son de al menos 1,25 de la canasta básica total.

La cifra representa la necesidad de obtener $142.203 más que en noviembre, es decir, el incremento de un mes a otro fue de más de 23%, evidenciando, una vez más la aceleración en el costo de vida de las últimas semanas de 2023, un número que también se condice con los datos y las proyecciones sobre la inflación de diciembre, que, además del dato del lunes, se estima que, a nivel nacional podría rondar entre el 25% y el 30%.

Estos números contemplan los bienes y servicios mínimos para la subsistencia, el conjunto de gastos vinculados con la adquisición o renovación de bienes durables para la vivienda, la salud y otros rubros como la indumentaria. Es que los precios de la canasta básica total (CBT), que sirve para medir la pobreza, y de la canasta básica alimentaria (CBA), que se usa para delimitar la indigencia, van a la par de los movimientos inflacionarios.

Cabe destacar que los valores que publicó la DGEyC corresponden a una familia tipo de dos adultos (varón y mujer de unos 35 años) económicamente activos y dos hijos varones (de 9 y 6 años), propietarios de su vivienda, por lo que no se toman en cuenta cuestiones como el alquiler.

En la comparativa con el año anterior, este piso mínimo de ingresos en diciembre de 2022 fue de $235.188, por lo que el aumento anual fue de $510.082, un 216%, también en línea con lo esperado respecto de la inflación interanual.

“En diciembre la inflación mensual en la Ciudad de Buenos Aires aumentó casi 10 puntos porcentuales respecto a noviembre, llegando al 21,1%. Eso reflejó un salto en las distintas canasta de consumo, que, siguiendo la ponderación que hace el gobierno de la Ciudad, se traduce en que, para seguir siendo de clase media, los gastos de ese sector debieron aumentar 23,6%”, indicó Claudio Caprarulo, director de Analytica, sobre la relación entre los datos de ingresos e inflación.

Y agregó: “En un contexto donde los salarios crecieron en menor porcentaje, muchas familias acudieron a ahorros para mantener sus pautas de consumo, mientras ya se evidencia que en algunos casos hubo modificaciones en estas. Hacia adelante, esta tendencia se va a profundizar”, aseguró el especialista.

Fernando Baer, economista de Quantum Finanzas, sostuvo: “En principio, plantea niveles de ingresos que surgen de la canasta de consumo típica, que en muchos casos pueden estar muy por encima del ingreso promedio familiar, inclusive en CABA”. Además, recalcó, al igual que Caprarulo, que esta situación empeorará de acá en adelante.

“Las cifras van a seguir deteriorándose, porque en las próximas semanas comienzan a impactar los aumentos en transporte, prepagas, educación, tarifas. Es decir, en muchos servicios que hasta ahora, en CABA, venían más rezagados que en otras regiones —aseguró el economista—. Esto implica que, de no mediar aumentos en los ingresos que compensen esto, el deterioro de la condición de la clase media y la vulnerable será mayor. Es un escenario complejo para administrarlo en el contexto de una sociedad cansada, con expectativas y dispuesta a hacer un esfuerzo, pero que claramente va a ir tornándose cuesta arriba”.

Estos resultados repercuten directamente en la persistencia de la clase media, como comentó el economista Jorge Colina: “Una canasta básica de $747.000 para la clase media es elevada porque el salario de la persona que está en el medio se acerca a los $400.000, con lo cual está señalando que debería tener por lo menos dos trabajadores formales ganando por lo menos el salario mediano, y el 50% de los trabajadores formales está por debajo de este, entonces el aumento de la canasta básica complica la persistencia de la clase media”.

Por otro lado, para este mismo grupo familiar, el piso de pobreza fue, también en diciembre, de $494.791, frente a los $396.761 que dieron los datos de noviembre, es decir, $98.030 más (25%). En tanto, para no ser indigente, se debió alcanzar ingresos por encima de $290.410.

Las familias del sector denominado “medio frágil” requieren ingresos aún mayores que las anteriores, lo que en diciembre implicó ingresos totales de $596.216, frente a los $482.453 de noviembre.

Por último, los sectores “acomodados” son aquellos que en diciembre ganaron $2.384.866, y este número representa $455.051 más que el mes anterior.

Fuente: La Nación

Adonde van a parar los bienes producto de los delitos secuestrados por el Poder Judicial


Entre 2015 y 2020 la Justicia Federal recuperó más de $ 4.900 millones. Opacidad de la información en la administración de bienes por parte del Poder Judicial. El objetivo de las cautelares y decomisos es quitar financiamiento a bandas narcos, trata de personas o lavado de activos para restituirlos a la sociedad civil y reparar a las víctimas. Experiencias exitosas en Argentina.

Por María Ester Romero

El uso de un auto judicializado, con chapa gemela adulterada, con el que el legislador Oscar González protagonizó un trágico siniestro el 29 de octubre en el camino de las Altas Cumbres y que provocó la muerte de una mujer y graves heridas en dos adolescentes, puso bajo la lupa a la Justicia: ¿qué hace y a quién destina los bienes secuestrados y decomisados?

Un informe reciente sintetiza un diagnóstico y las propuestas efectuadas por un colectivo de organizaciones que tienen en marcha el proyecto ‘Bien Restituido’ y la consultora Analytica sobre la Justicia Federal a nivel nacional. El objetivo que procura la iniciativa es reutilizar social y económicamente los bienes que son instrumento, producto y provecho de actividades criminales complejas. Es decir, quitar financiamiento a las bandas narco, de trata y que lavan activos, reparar a las víctimas directas y las indirectas –el Estado y la sociedad en general– haciendo eje en los sectores más vulnerables.

El diagnóstico sobre la problemática no es el mejor: la política criminal en Argentina demostró que todavía no trabaja con ese objetivo y que hay opacidad en la información sobre cantidad y valuación de los bienes incautados. También, que los operadores judiciales están enroscados en discusiones sobre si es un proyecto viable económicamente –el mantenimiento de autos, inmuebles, etc, es costoso– y sobre qué destino debe dárseles. Mientras tanto, hay un cúmulo de autos y viviendas que queda congelado, devaluándose o, en el peor de los casos, en manos de particulares y sin ningún fin social. Las leyes lo permiten.

Y el dato se agrava si se tiene en cuenta que un proceso judicial tarda un promedio de ocho años hasta llegar a la sentencia. Mientras tanto, los bienes pierden el valor.

En 2009, el Ministerio Público Fiscal instruyó a fiscales federales penales que, ante un caso de trata de personas, soliciten a los juzgados que inmuebles judicializados sirvan de alojamiento a las víctimas o como futura garantía de una eventual pena y/o condena pecuniaria, previendo alguna forma de indemnización a víctimas. Una buena iniciativa.

Pero la Corte Suprema de Justicia de la Nación mediante el acuerdo N°2/2018 aprobó el Reglamento de Bienes Decomisados y fijó pautas para la utilización “de los efectos secuestrados en causas penales que no puedan entregarse a sus dueños y objetos decomisados con finalidad pública”. No estableció criterios objetivos por lo que hay un amplio margen de discrecionalidad con la posibilidad –dice el reporte– “que en potencia se utilicen con finalidades incompatibles con la que la misma norma persigue”. Además, faltan mecanismos para rendir cuentas e información de acceso público. 

Por un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) el Poder Ejecutivo estableció en 2019 la acción civil de extinción de dominio sobre bienes obtenidos del narcotráfico, terrorismo y financiamiento de actividades terroristas, corrupción de menores, trata de personas y pornografía infantil. Pero hubo dictamen solicitando su rechazo por parte de la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo. No se rechazó, sigue vigente, pero la experiencia demostró que su uso es limitado.

Bienes secuestrados

La casuística relevada por el colectivo de organizaciones que impulsa el ‘bien restituido’ demuestra que son casos aislados en los que magistrados dieron destino social a los bienes secuestrados. Sin embargo, si se analizan los números de inmuebles y vehículos bajo tutela judicial, la cifra es significativa. Incluyendo todo el universo de vehículos, barcos, aviones, inmuebles y dinero en diferentes denominaciones –aun los que carecen de algún dato, como fecha de secuestro– la valuación total de los bienes secuestrados entre 2015 y 2020 fue de $ 4.973,5 millones, “lo que equivale a casi la totalidad del presupuesto anual 2022 del Inaes (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social)”.

Cantidad de bienes secuestrados

La tarea de relevar y cuantificar no fue fácil. Las organizaciones que realizaron el trabajo se encontraron con obstáculos: la falta de transparencia, demora en la entrega de información, inexactitudes en la valuación de bienes.

Cinco casos de reutilización social. Ante la falta de un andamiaje normativo preciso, hay experiencias basadas en la decisión personal de cada magistrado. Son elocuentes de lo que se podr ía lograr con una política criminal más extendida y reglada con claridad, aún con sus defectos y dificultades.

  1. En 2008, el juez federal Sergio Torres procesó a tres tratantes de personas en talleres textiles clandestinos. Se incautaron las máquinas, que fueron entregadas al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti). Esta decisión conllevó la obligación, para el Inti, de generar puestos de trabajo para las personas que habían sido rescatadas de la situación de trata. El instituto celebró un convenio con el Gobierno de Caba, que generó el ‘Centro Demostrativo de Indumentaria’. Allí comenzaron a t rabaja r la s personas rescatadas de los talleres clandestinos. Actualmente hay siete cooperativas en las que se encuentran empleadas alrededor de cien personas.
Centro textil
UNA BUENA. Una experiencia positiva a partir de la decisión del juez federal Sergio Torres. Máquinas incautadas a responsables de trata laboral, generaron cooperativas para dar trabajo a las víctimas.
  1. En 2013, el juez federal Ariel Lijo, en una situación similar, procesó a tratantes que mantenían en situación de servidumbre a ciudadanos bolivianos en talleres textiles clandestinos. Tras decomisar las maquinarias que se utilizaban en estos sitios, las entregó como depositarios judiciales a la Fundación La Alameda y a la Secretaría de Derechos Humanos de la CGT, que efectivizaron un contrato por el que entregaron la maquinaria a la comunidad indígena ‘Potae Napocna Navogoh’, de Formosa. Se constituyeron cooperativas en la comunidad y hubo capacitación a mujeres.
  2. En una causa por narcotráfico, el juez Sergio Torres recuperó una casa usurpada y la destinó a la organización Madres contra el Paco, para que realicen allí un centro de recreación y rehabilitación de jóvenes en situación de adicción.
  3. En 2016, la justicia capturó al narcotraficante Delfín Castedo, que introducía cocaína al país desde Bolivia para enviarla a Italia. Se secuestraron sus propiedades, de las cuales 28.000 hectáreas fueron destinadas a la Universidad de Buenos Aires por decisión del juez Federico Villena a cargo del Juzgado Federal N° 2 de Lomas de Zamora, con el propósito de que su explotación permita solventar becas en dicha universidad para jóvenes del norte del país.
  4. En 2017, el juez Sebastián Casanello tramitó una causa por lavado de dinero que decantó en el secuestro y posterior decomiso de maquinaria vial. En este caso, para realizar diversas tareas, se postularon como depositarios judiciales la Agencia Nacional de Vialidad Nacional, municipios de distintas provincias y el Ejército Argentino.

QUIÉNES SON

Las organizaciones que realizaron el trabajo son: Fundación Multipolar, Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), Libera Asociaciones Nombres y Números contra las mafias y el Circolo Giuridico di Argentina, junto a la consultora Analytica. La meta es la aprobación en el Congreso Nacional del proyecto de ley de Administración y Reutilización Social de los Bienes Cautelados y Decomisados en causas penales. El material referido en este informe fue producido con el apoyo financiero de la Unión Europea.

Dólar blue: por qué está congelado y qué puede pasar


Los dólares paralelos se mantienen en valores similares a los de 3 meses atrás. En exclusivo, economistas analizan los motivos y revelan qué estiman para el corto y mediano plazo.

Las cotizaciones paralelas del dólar siguen operando con cierta estabilidad. Más allá de las variaciones diarias al alza y a la baja, los precios del blue, MEP y CCL exhiben valores similares a los de hace tres meses atrás, entre los $ 290 y los $ 300, lejos del récord nominal de $ 350 que tocaron en julio.

Aurum Valores afirmó que, considerando la pérdida de reservas del Banco Central y las expectativas de varios meses sin poder acumular divisas, sumado al volumen de pesificación de la economía, los dólares paralelos operan por debajo de los niveles que sugieren su correlación con la base monetaria (M3).

«El desvío está por debajo de los mínimos de 2021, repitiendo moderadamente el patrón que siguió desde marzo a junio de este año, cuando prevaleció el carry trade. Estimamos que el desvío actual podría relacionarse con la fuerte suba de las tasas en pesos empujadas por el Ministerio de Economía», indicó la financiera.

El economista Gabriel Caamaño coincidió en que la relativa calma de los paralelos «es producto de la fuerte suba de tasas títulos del Tesoro, que está pagando tasas reales considerables por plazos cortos», aunque advirtió que esto no es sostenible en el largo plazo.

«Pesan varias cosas. Las subas de tasas en pesos ayudan a fomentar el carry trade. Esto de que los bancos pueden liquidar dólares al precio del MEP para pagar consumos en el exterior también puede estar ayudando a la estabilidad. A la vez, el contexto internacional», agregó Nicolás Rivas, trader de Buenos Aires Valores.

HACIA ADELANTE


El analista financiero Christian Buteler afirmó que, con los niveles de emisión monetaria, aunque ahora son menores, y una inflación viajando entre el 6% y 7% mensual, es esperable que los tipos de cambios paralelos tengan un recorrido alcista, a pesar de que es difícil prever cuándo ocurrirá.

«Cuando los turistas vuelvan del Mundial y otros destinos, no van a pagar los $ 330 del dólar tarjeta si lo pueden comprar a $ 290. Esto va a generar algo más de demanda y, por lo tanto, una suba de precios. Son buenos precios para comprar en caso de tener que hacerlo. Dudo que los podamos ver mucho más abajo de lo que están ahora», comentó Buteler.

Lo

Rivas, que también considera como atractivas a las cotizaciones actuales teniendo en cuenta la dinámica inflacionaria, hacia adelante espera cierta estabilidad, pero acompañando al índice general de los precios de la economía a partir de los niveles en los que se encuentran en este momento.

«A fin de año, las empresas tienen menos liquidez, entre otras cosas por el pago de aguinaldos. Sin un evento de shock previo, la presión sobre los paralelos debería aumentar más fuerte durante el primer trimestre de 2023. A la vez, el mayor cepo cambiario presiona sobre los paralelos», señaló Claudio Caprarulo, director de Analytica.

Caprarulo sostuvo que por eso se entiende el reciente canje de deuda en pesos que anunció el Gobierno. El equipo económico busca «despejar los vencimientos para evitar que, si las expectativas se desanclan, como ocurrió a mitad de año, exista un abandono de los instrumentos en pesos y una posterior dolarización».

¿Termina la pax del dólar blue?: esto dicen los analistas


Analistas consultados por Ámbito afirman que el dólar blue podría superar los $300 antes de fin de año. Las causas.

El mercado financiero en la Argentina mantiene relativa calma, con cotizaciones mayormente estables tanto en el segmento oficial como en el informal. Así, los dólares financieros (MEP y CCL) oscilan entre los $ 290 y los $ 300, mientras que el dólar blue sigue la misma línea, lejos de los picos de este año.

Al respecto opinaron analistas consultados por Ámbito afirmaban esta semana que el dólar blue podría superar los $300 antes de fin de año.

«Aunque sin sorpresa, ya que estaba previsto tras el ¨dólar soja¨, los operadores siguen monitoreando a diario la sangría de reservas, la cual no resulta sustentable y de ahí la creciente expectativa sobre nuevas medidas en la demanda y la oferta que apunten a corto plazo hacia un mayor equilibrio cambiario», sostuvo Gustavo Ber.

Y agregó: «El renovado reacomodamiento en los dólares financieros podría estar comenzando a mostrar que algunos operadores estarían más inclinados a cerrar sus apuestas hacia el ‘carry-trade’ de los últimos meses, ante la expectativa de que no se podría seguir profundizando el atraso con referencias ‘planchadas’ mientras se extiende la elevada inflación y nominalidad de fondo, ya que un abaratamiento al final despertaría a la demanda por cobertura de los agentes económicos.

«¿Por qué no sube el blue? Basta con ver las estadísticas monetarias y fiscales, el gobierno nos lleva a una recesión nunca vista. Está reduciendo el gasto público, pero aún no logra superávit fiscal, hay una gran contracción en la cantidad de pesos circulante, aumentó fuertemente las tasas de interés, restringió importaciones, agudizó el cepo y no genera confianza. Es un cóctel difícil de digerir por una economía que está desacelerándose en forma muy vertiginosa», sostuvo el analista Salvador Di Stéfano.

¿Qué pasará con el dólar?

Andrés Reschini, analista en F2 Soluciones Financieras, señaló: “En lo que vamos de noviembre hasta el cierre de ayer, el tipo de cambio A3500 se movió a un ritmo del 6,89% TEM o 125% TEA. Revertir la pérdida de competitividad va a depender de lo que pase también con la inflación. Es distinto si el IPC viaja al 6% y el tipo de cambio al 6,9%, a que el IPC siga acelerando y el tipo de cambio oficial lo corra de atrás, como viene sucediendo desde al menos 2021, con la excepción de septiembre de este año, mes para el cual ambos empataron”.

En esta línea, Pablo Repetto, head of research en Aurum Valores, destacó que “la magnitud del atraso ya es tan grande que no vemos posible que el crawling peg pueda ser exitoso en revertir lo acumulado; quizá en el mejor de los casos alcance para no profundizarlo”.

Reschini consideró: “El tipo de cambio oficial está mucho más abajo del tipo de cambio de equilibrio del mercado. Como está más abajo de lo que se operaría bajo condiciones de libre mercado, los agentes tratan de no liquidar, pero, a la vez es un incentivo a adquirir a ese TC, o sea, importar. Vimos un ejemplo de que cuando se pone más a tono con lo que sería un valor de mercado, este responde cuando se implementó el Programa de Incentivo Exportador para sojeros”.

Fajo de dólares.

Asimismo, un informe de Ecolatina advierte que sobre esta dinámica sigue influyendo una menor liquidación del agro: “En la semana pasada, la liquidación del sector ascendió a u$s 182 millones, 40% por debajo de los u$s 311 millones de la semana previa. El promedio diario de u$s 36 millones, resulta asimismo muy inferior a los u$s 150 millones diarios de agosto. Cabe recordar que durante octubre la liquidación del agro fue la menor desde marzo 2020. De esta forma, se va revelando más claramente la magnitud del adelantamiento de exportaciones provocado por el “dólar soja” y la consecuente escasez de oferta para los meses subsiguientes. La sequía ya está dejando daños permanentes que redundarán en una menor oferta en el MULC y volverán más angosto el margen de maniobra de la autoridad monetaria”.

Para el economista Gabriel Caamaño la calma en los dólares financieros «es producto de la fuerte suba de tasas títulos del Tesoro, que está pagando tasas reales considerables por plazos cortos», aunque advierte que esto no es sostenible en el largo plazo.

El analista financiero Christian Buteler afirmó que, con los niveles de emisión monetaria, aunque ahora son menores, y una inflación viajando entre el 6% y 7% mensual, es esperable que los tipos de cambios paralelos tengan un recorrido alcista, a pesar de que es difícil de prever cuándo ocurrirá.

«Cuando los turistas vuelvan del Mundial y otros destinos, no van a pagar los $ 330 del dólar tarjeta si lo pueden comprar a $ 290. Esto va a generar algo más de demanda y, por lo tanto, una suba de precios. Son buenos precios para comprar en caso de tener que hacerlo. Dudo que los podamos ver mucho más abajo de lo que están ahora», comentó Buteler.

Claudio Caprarulo, director de Analytica, advirtió: «A fin de año, las empresas tienen menos liquidez, entre otras cosas por el pago de aguinaldos. Sin un evento de shock previo, la presión sobre los paralelos debería aumentar más fuerte durante el primer trimestre de 2023. A la vez, el mayor cepo cambiario presiona sobre los paralelos», señaló .